viernes, 18 de marzo de 2011

Empiezan aprestos para invadir Libia; Gadafi: "será un infierno"

EFE.- Los aprestos de invasión contra Libia empiezan a tomar cuerpo después de la aprobación de la ONU para que la OTAN, su brazo armado, intervenga en la crisis del país africano, envuelto en una rebelión que pretende sacar del gobierno al dictador Muamar Gadafi, con 42 años en el poder.
 Bélgica tiene listos seis cazabombarderos F-16 para participar en una eventual operación de la OTAN sobre Libia; España puso a disposición las bases aéreas de Rota y Morón, así como medios navales y aéreos; Inglaterra envió aviones caza para poner un cerco aéreo y Francia a reiterado su apoyo y Alemania, aunque no mandaría fuerzas, está dispuesta a sustituir con soldados suyos a los que otros países saquen de Afganistán para mandarlos a Libia.
Los aviones belgas están actualmente desplazados en Grecia para unas maniobras de entrenamiento y sólo esperan "una petición de la OTAN" para una hipotética implicación.
Bélgica ya envió al Mediterráneo central un dragaminas dentro del aumento del despliegue naval acordado la pasada semana por los ministros de Defensa de la Alianza Atlántica.
Gadafi: "Será un infierno"
Mientras Muamar el Gadafi aseguró que desatará un "infierno" sobre quienes le ataquen en una entrevista con la televisión lusa en la que advirtió de que un conflicto como ese acabaría con la seguridad en el Mediterráneo.
"Si el mundo actúa como un loco, nosotros haremos lo mismo. Vamos a responder. También haremos de su vida un infierno. Nunca tendrán paz", aseguró el dirigente libio.
"La zona del Mediterráneo quedaría dañada, destruida, no habría ninguna circulación segura ni marítima ni aérea", vaticinó el coronel al ser preguntado por la posibilidad de una operación internacional contra su régimen, en concreto con la participación de Francia.
En la entrevista, difundida hoy por la Radio Televisión Portuguesa (RTP), Gadafi se mostró convencido de que el pueblo de Bengasi, donde se concentran los rebeldes contra su régimen, le es fiel y quiere ser liberado de los "agentes de Bin Laden".
"El pueblo de Bengasi está con nosotros, está conmigo, nos piden que vayamos a liberarlos", dijo el coronel, convencido de que en Libia le respalda "la gran mayoría".